Imparable. Valencia, 2008
Después de la gasolinera, fuimos a unas vías. Allí montábamos nuestros escenarios sobre ellas, claro que de vez en cuando, unas cuantas toneladas a 100 kilómetros por hora nos invitaban a abandonar el lugar. Carlos sigue hoy en la gasolinera, sacándole partido a su marco.
Ésta podría considerarse una digna versión diurna del aquel tranvía en Praga.
El viernes más de éste photowalk.
Ésta podría considerarse una digna versión diurna del aquel tranvía en Praga.
El viernes más de éste photowalk.
2 comentarios:
me encanta el "movimiento" de ese tren a toda castaña...
Ahora que caigo, nunca lo he intentado...otra cosa más pendiente...
Un beso
exacto. una imagen congelada y todo nítido puede quedar incompleta en muchos casos.
Ya nos enseñas tus intentos!
Publicar un comentario